La heroína, con su incomparable capacidad adictiva, ejerce un poderoso dominio sobre quienes la consumen. Las consecuencias de esta adicción son múltiples y devastadoras, tanto físicas como psicológicas.
Por fortuna, existen medios para superarla. Los tratamientos modernos, que combinan farmacoterapia y psicoterapia, han demostrado su eficacia. En Turquía, en particular, una red de clínicas especializadas ofrece programas de desintoxicación y rehabilitación de alta calidad. Estos programas, diseñados para satisfacer las necesidades específicas de cada paciente, tienen como objetivo promover una recuperación duradera y una reinserción social satisfactoria.